domingo, 27 de noviembre de 2011

ARTE ROMANO (s. V a. Cto.-s. IV d. Cto.): ESCULTURA ROMANA: EL RETRATO

La escultura en Roma sigue los modelos de la escultura griega, y de hecho los escultores que trabajan en Roma son en su mayoría griegos. Realizan numerosas copias de clásicos griegos, y gracias a ello conocemos hoy la escultura de la Grecia Clásica.

La escultura es tanto de relieve como de bulto redondo, destacando como propio de Roma el retrato, que recibe influencia del retrato helenístico. El relieve se dedica principalmente a temas históricos y religiosos.

En cuanto a la temática ya no se interesan tanto por el panteón de dioses, ya que el romano tiene el culto dentro de su propia casa más que en el templo, los dioses lares se representan por pequeñas figuritas, y por ello la gran escultura se dedica para retratar a los grandes personajes de la República y del Imperio.


Pueden ser de cuerpo entero o bustos y el material es mármol en su mayor parte y en ocasiones bronce, utilizando el método de la cera perdida. En cuanto a la técnica es depurada, ya que usaron el trépano para las labores más profundas.

Los autores son anónimos en su mayor parte ya que lo que interesa destacas es al retratado, y su estilo ya no es tan idealizado como en la Grecia Clásica, ya que representan lo que ven, y en ocasiones reflejan lo psicológico.

Hay varios tipos de retratos:

- Bustos: muy comunes desde época republicana, donde las familias tenían colecciones de retratos de antepasados, normalmente sacados de las mascarillas funerarias realizadas en yeso y que en muchas ocasiones se pasaban a cera o mármol que se pintaba en una primera época, más tarde se tallaba la pupila y el iris de los ojos para hacerlas más vivas cuando se dejó de pintarlas.

- De pie, en los que el personaje puede aparecer con coraza (toracatos) o con toga (togatos).

- Tumbado o sedente: de clara influencia etrusca y más propio del retrato femenino.

- Ecuestre: propio de la figura imperial en el Alto Imperio, aunque durante el Bajo Imperio algunos personajes importantes también lo utilizaron.



EL RETRATO REPUBLICANO
El Retrato Republicano, pueden ser un busto corto, triangular, en el que no asoma el vestido. El pelo es corto, muy plano de talla, casi sin peinar o calvos. Las mujeres aparecen retratadas con raya en medio y el pelo hacia atrás, muy idealizado. Destacan los retratos de Livia, la esposa de Augusto.

"Retrato de Julio César" s. I a. Cto.


"Retrato de Cicerón" s. I a. Cto.





"Retrato de Pompeyo" s. I a. Cto.


Esculturas de senadores portando en sus manos los retratos de aquellas personas que les ayudaron a llegar al Senado o de sus hijos (imágines maiorum).

"Retrato de Lucius Junius Brutus" (Brutus Barberini), siglo I a. Cto.

Hay mucho idealismo helenístico todavía en el retrato.

EL RETRATO IMPERIAL
El Retrato Imperial se utiliza para resaltar los poderes del emperador. En el siglo I los emperadores aparecen con el pelo rizado y sin barba. También las mujeres de los emperadores podían aparecer casi divinizadas, es el caso de Livia, la esposa de Augusto. Los cabellos se exageran en el caso del retrato femenino.

- Como CÓNSUL CUM IMPERIO, llevan el manto consular y levantan el brazo en señal de arenga. Con uniforme militar.

"El Emperador Augusto de Prima Porta" (Mármol, Musei Vaticani) es la imagen que lo representa de jefe militar o Cónsul Cum Imperio, en postura de arengar. Una imagen de eros en la zona inferior indica su origen divino.
Se trata de una copia de h. 14 d. C. de un original del 20 a. Cto. Hallada en Prima Porta (norte de Roma) en la Villa ad Gallinas Albas, propiedad de Livia, esposa de Augusto y su sacerdotisa tras morir y ser divinizado.

El princeps arenga a la multitud con gesto de orador y solemnidad magistral. Sus pies descalzos indican que se encuentra ya en el Olimpo, lo que hace pensar que se trate de la estatua de culto del lugar donde se halló.

La obra aúna la mejor tradición ática en su estudio anatómico, y la retratística romana.



En el centro de la coraza se representa la devolución, en 20 a. C., de unas insignias romanas tomadas en batallas anteriores por Fraates IV, rey de los partos. Un personaje (Marte o seguramente Tiberio, que fue el que recogió las insignias en la realidad) acude junto con la Loba Capitolina a la presencia de Fraates. Arriba, el Sol surge del Cielo (con manto), precedido de la Aurora y el Rocío (o la Luna y la Aurora). A los lados, dos provincias conquistadas se entristecen (Germania o Hispania a la izquierda y Galia a la derecha). Abajo, entre Apolo y Diana, la Tierra fecunda (Tellus) alimenta a dos niños.

- Como PRETOR, administrador de justicia y legislador, aparecen con el rollo de papel en la mano. "Augusto como Pretor" Museo del Louvre, París.


- Como PONTIFEX MAXIMUS, aparecen con el manto (toga virilis) extendido por la cabeza y la patena en la mano con atributos del emperador con funciones de sumo sacerdote.

"Augusto de la Vía Labicana", representado como sacerdote con el manto sobre la cabeza y la toga (togata). Mide 2,07 m. de altura. Se encuentra en el Museo Nazionale Romano di Palazzo Massimo alle Terme de Roma.

- Como HÉROE o DIOS, aparece semidesnudo y con la corona de laurel, que será luego la forma de representarlo divinizado. En ocasiones se le identifica con una divinidad en concreto.

"Claudio" (s. I d. Cto), Museos Vaticanos. Con corona vegetal y semidesnudo.


"Adriano como Zeus" s. II d. Cto.

"Commodo" (s. II d. Cto.), aparece representado como Hércules, cubierto con piel de león y ostenta una maza. Ya se marcan iris y pupila. Se representa la figura hasta el vientre.


- ECUESTRE: Aparece en el siglo II d. Cto. bajo el imperio de Marco Aurelio.

"Marco Aurelio a caballo", s. II d. Cto. en la Plaza del Capitolio de Roma. No es la primera de la historia (ya que se encontró una anterior en Pompeya), pero inspirará a muchas otras posteriores del Renacimiento y el Barroco. Realizada con la técnica de cera perdida.


Las estatuas de los emperadores aparecen repartidas por todo el Imperio, ya que era la manera de hacerlo llegar a la población y que acataran su poder. Aparece desde época de Augusto al que gustaba ser representado siempre joven por muchos años que tuviera.
"El Emperador Adriano", s. II d. Cto. ; a partir del siglo II se generalizan las barbas y se exageran los rizos.

"El Emperador Caracalla" s. III d. Cto.

"Estatua monumental de Constantino" s. IV d. Cto. Museo Capitolino, Roma. En época de Constantino se llegará a la representación monumental, gigantesca, pero muy simples y hieráticas, que influirán en los retratos bizantinos.


Cabe destacar en época de Adriano los retratos de su amante Antinoo, que llenarán toda la época, siendo representado como todos los dioses y que en si mismo será proclamado semidiós. Se suicidó en el Nilo para salvar al emperador de un maleficio, según unos, pero para otros se debió a que Adriano le había retirado su favor.
"Antinoo de Delfos" s. II d. Cto. Castillo de Vincennes (Francia).

"Antinoo como Osiris" s. II d. Cto. Museo de Louvre (París)

"Antinoo de la Villa Adriana", s. II d. Cto. Museo de Louvre (París)